La vida de Nikos Kazantzakis es inquieta, compleja, espiritual y cosmopolita y esto se refleja en sus obras.
(Parte 1)
Nace en 1883, en Iraklion, Creta, cuando todavía pertenecía al Imperio Otomano. Su padre, Mihalis, era un vendedor agrícola de Varvari. En 1889 hay un intento de insurrección en la isla contra los griegos, Nikos pasa dos años a salvo en Naxos, en una escuela de monjes franceses, que le enseñan su lengua. Completada su educación en Naxos, marcha en 1902 a estudiar derecho a Atenas, allí empieza a publicar ensayos alrededor de 1906.
Se da a conocer con un premio por su obra Empieza el día y comienza su carrera de periodista. Es iniciado como masón y se traslada en 1907 a París, a estudiar, y allí continúa sus actividades literarias.
Allí recibe lecciones de Henri Bergson y profundiza en la figura de Nietzsche, que influirá en su espíritu y en sus obras. Por esos años es activista de grupos de presión por la adopción de la dimotikí en la educación. Conoce a Galatea Alexiou y se casan, viviendo en Atenas. Vive de la traducción. Difunde la filosofía de Bergson entre los intelectuales.
Estalla la primera guerra balcánica (1812), se presenta voluntario y trabaja en la oficina del primer ministro, Venizelos. Junto con Sikelianós pasa un tiempo en el monte Athos en 1914 y luego recorren Grecia, sueñan con fundar una nueva religión, lee a Dante, Buda y los Evangelios. Escribe las tragedias Cristo, Odiseo y Nikiforos Fokas. Lleva una explotación de madera en el monte Athos y, después, en 1917 se asocia a un trabajador, Yorgos Zorbas y explotan una mina de lignito en Mani, en el Peloponeso, estas dos experiencias serán la base de su Alexis Zorbas.
En 1919 es encargado por Venizelos de repatriar a 150.000 colonos griegos, perseguidos en el Cáucaso por los bolcheviques y distribuirlos en Tracia y Macedonia, experiencias en que se basará Cristo vuelto a crucificar. Cuando Venizelos es derrotado, en 1920, Kazantzakis se desvincula del gobierno griego. Recorre Alemania en la posguerra, en Viena, en 1922, contrae un eccema facial que periódicamente le afectará hasta su muerte, estudia la obra de Buda y abandona su nacionalismo, alineándose al comunismo. Empieza Askitiki, un intento de reconciliar comunismo y budismo. En 1924 está varios meses en Italia, le marcan el Asís de San Francisco y Pompeya, conoce a la vuelta a Eleni Samiou y se divorcia de Galatea en 1926.
Se suceden viajes como corresponsal de un periódico ateniense: Rusia, Chipre, Palestina, España e Italia (Entrevistando a los dictadores del momento), Egipto y el Sinaí. Conoce a Pandelis Prevelakis, su futuro discípulo y biógrafo. Se aísla en Egina para escribir su Odisea. Recopila su primer volumen de artículos de viajes. En octubre de 1927 es invitado por el gobierno soviético al aniversario de la revolución, conoce a Panait Istrati, un escritor greco-rumano, afín a sus ideas comunistas, viajan juntos por los Balcanes y luego a Rusia, donde conocen a Gorki, pero el asunto Roussakov (que tiene que ver con la persecución de los trostkistas) divide a ambos escritores.
Kazantzakis viaja solo a Berlín, donde da lecciones sobre la Unión Soviética y en una casa de campo de Checoslovaquia escribe en francés Moscou a crié, que será más tarde conocida como Toda-Raba, también escribe Kapetan Elia, primer intento de Kapetan Mihalis.
Alrededor de 1930 se suceden, para sacar dinero, diferentes ocupaciones: en Francia, traduce libros infantiles para editores griegos; en Egina, colabora en un diccionario Griego-Francés y con Prevelakis intenta, sin buenos resultados, una colaboración para traducciones y guiones cinematográficos. Traduce La Divina Comedia, lo que le sugiere crear sus propias terzinas, una de ellas sobre El Greco. En 1932-33 intenta seguir su carrera en España, traduce poesía española y escribe sus impresiones sobre España, pero no puede mantenerse y regresa a Egina, trabaja en libros de texto para bachillerato. Viaja en 1935 a Japón y China para escribir artículos de viaje y escribe Le Jardin des rochers con sus impresiones del viaje. En 1936 crea la obra Othelo vuelve y traduce Fausto. En octubre va de corresponsal de guerra a España, donde entrevista a Franco y a Unamuno.
En 1938 se publica la última revisión de la Odisea en edición de lujo. En 1939 es invitado a Inglaterra y escribe en Stratford la tragedia Juliano el Apóstata. En 1940, la invasión de Grecia por Mussolini le hace recuperar parte del nacionalismo perdido. Acaba el drama Buda y el primer esbozo de Alexis Zorbas. Durante la guerra está confinado en Egina, perfecciona esas dos obras, traduce La Ilíada y crea la primera aproximación a La Última Tentación y dentro del teatro, crea Capodistria, Constantinos Paleologos y la trilogía de Prometeo. Tras la retirada alemana, crea un pequeño partido de izquierda no comunista y es ministro sin cartera del gobierno de Sofoulis. Se casa con Eleni Samiou.
En 1946 se marcha a Inglaterra, ya nunca volverá a Grecia, Intenta sin éxito crear una "Internacional del Espíritu" con intelectuales. En Francia, es invitado por el gobierno, traduce Alexis Zorbas al francés. Trabaja para la UNESCO facilitando las traducciones literarias entre culturas, deja pronto ese trabajo para dedicarse más a sus obras. Zorbas se distribuye por Europa y América. En 1948-50 concreta las obras Sodoma y Gomorra, Cristo Vuelto a Crucificar, Los Fratricidas (sobre la guerra en Grecia), Kouros, Cristóbal Colón y Kapetan Mihalis y acaba La Útima Tentación. Viaja con Eleni a Italia en 1952, y mientras se recupera de una infección de ojo en Holanda y en París estudia la figura de Francisco de Asís y escribe San Francisco, el mendigo de Dios.
En 1953-54 se topa con la iglesia: primero la Ortodoxa le persigue por sacrilegio en ciertas partes de Kapetan Mihalis y de La última tentación y luego el Papado de Roma incluye a esta última en su lista de libros proscritos. En 1955 acaba su autobiografía espiritual: Informe al Greco. Recibe el Premio de la Paz en Viena y pierde el Nobel en el último momento, a favor de Juan Ramón Jiménez. Sus novelas se siguen distribuyendo por todo el mundo y asesora a Jules Dassin para adaptar Cristo vuelto a Crucificar al cine bajo el título Celui qui doit mourir.
En 1957 viaja a China invitado por el gobierno, tras varias complicaciones con su salud a la vuelta y tras contraer una fiebre asiática, muere el 26 de octubre, a los 74 años. Al repatriar su cadáver la iglesia ortodoxa seguía proscribiéndolo, su cuerpo descansa en Iraklion, en las murallas venecianas junto al budista epitafio: "No deseo nada, no temo nada, soy libre".